Cuando me despidieron no fue exactamente un despido. Tenía contrato temporal, así que fue sólo un "ya no nos aprobaron el presupuesto para tu sueldo", típico.
Además mi jefe me lo comunicó todo enojado, inició con un reclamo por la falta de disciplina de los diseñadores, porque yo había llegado tarde ese día, y me comunicó el fin de mi colaboración ahí en la empresa.
Sí, llegué tarde, y no era el primer día que llegaba tarde, sin embargo llevaba 2 meses llegando tarde y nadie lo notaba porque no tenía trabajo que hacer, nadie me esperaba, nadie me buscaba. Y la verdad es que soy una persona puntual, lo que sucedió fue que me desanimé por lo siguiente:
Suelo llegar temprano y más desde que me había mudado al centro de la ciudad, aún así, algo pasó un día que se me hizo terriblemente tarde, tráfico, sueño, algo... no recuerdo, y pos tenía que avisar de la tardanza así que le mandé un mensaje a una compañera ( la escogí a ella porque en aquel entonces no sabía quién era mi jefe directo) entonces le pedí que si alguien preguntaba por mí que les contara que ya iba en camino.
Finalmente llegué a la oficina y saludé a la mencionada compañera, recuerdo muy bien que después del saludo me dijo "No te preocupes, nadie preguntó por ti".
Nadie preguntó por mí. Pasé mucho tiempo meditando en eso. Era cierto, terriblemente cierto. No tenía proyectos o se cancelaban apenas los comenzábamos, y llegaba todos los días a sentarme sin tener algo en qué ocuparme. Me ponía a ver videos o me ponía a estudiar algún tema. Fueron meses así, y hasta ese momento caí en la cuenta de que, sí, no tenía jefe, nadie me ponía trabajo, estaba a la deriva, sin órdenes, sin guía, sin trabajo, estaba en el limbo.
Lo de "no tener jefe" era literal. En cierta restructuración del área yo y los otros becarios quedamos directamente bajo el mando del director del área que, siendo un hombre muy despistado, nos dejó completamente olvidados. Después de meses de olvido, creo que alguien lo notó y extraoficialmente nos dieron órdenes nuestros anteriores jefes. No cambió gran cosa, lo único diferente fue que ahora a pesar de no tener trabajo, ya tenía quién me reclamara si no llegaba temprano.
Fue así, como ocurrió ese día en que llegué tarde y mi "jefe" me dijo que ya no me renovarían contrato. Todo fue porque el jefe de recursos humanos ya no aprobó el presupuesto para mi sueldo porque, según su apreciación, muy acertada, era que ya no nos veía hacer ningún proyecto. Claro, era cierto, yo no invento proyectos, me los tienen que asignar; pero es como una paradoja que mis jefes me corran por no hacer nada cuando ellos son los que me tienen que asignar proyectos.
Fue un despido que no era despido, sino fin de contrato temporal. Pasé dos años y medio trabajando para ellos, me desvelé muchas veces, trabajé proyectos los fines de semana, falté a muchas clases y reprobé materias por atender el trabajo y me dolió mucho que tanto esfuerzo fuera en vano. Pensé que podría tener un futuro en la empresa, pero resultó que no, nunca tuve futuro, nunca habría un lugar para mí aunque me hubiera esforzado mucho más.